Cataluña se ha convertido en el clúster agroalimentario bio de Espanya, siendo conocida en Europa y a nivel internacional por sus cultivos mediterráneos ecológicos.
Barcelona y Cataluña, a principios de los años 90, dieron a conocer con la celebración de los Juegos Olímpicos, que abrieron un camino de oportunidades para toda Cataluña, también para el sector agroalimentario de nuestra casa.
Paralelamente, el sector ecológico comenzó a abrirse paso entre la gran industria agroalimentaria. Hoy día, nadie discute que Barcelona y Cataluña son conocidas y reconocidas en toda Europa y del mundo, al igual que los alimentos ecológicos catalanes gozan del prestigio de una certificación exigente y de garantía como la del Consejo Catalán de la Producción Agraria ecológica (CCPAE).
Cataluña, clúster agroalimentario bio:
Como en muchos otros sectores productivos, Cataluña es líder en agroalimentación biológica en España. Si bien el crecimiento general en España está siendo moderado en los últimos años, Cataluña sigue protagonizando aumentos importantes que la sitúan a la cabeza en cultivos típicamente mediterráneos, como la vid y el olivo, y la agroindustria transformadora y la comercialización. Estos cultivos que han caracterizado siempre la comunidad autónoma catalana ha convertido a Cataluña en el clúster agroalimentario bio de España.
Cataluña cuenta con el 27,2% de de operadores elaboradores, el 40,2% de de importadores, el 25,4% de exportadores y el 28,2% de comercializadores del sector ecológico en todo el Estado.
Concretando, Cataluña, el clúster agroalimentario bio de España, destaca por ser la comunidad con más agroindustria relacionada con la elaboración de pan (43,5%), elaboración de bebidas (20%), fabricación de piensos (31,4%) y la elaboración de productos cárnicos ( 29,8%). Segunda en la elaboración de productos lácteos (16,5%). Y tercera en la transformación hortofrutícola (14,4%), elaboración de aceites (11,9%).
¿Como ha conseguido Cataluña convertirse en el clúster agroalimentario bio de España?
Este crecimiento, que ha ratificado a Catalunya como principal clúster agroalimentario bio de España, ha sido impulsado sobretodo gracias a aquellas pequeñas y medianas empresas que han permitido madurar al sector, a la vez que ha sido incentivado por la administración.
Dicho proceso no se entendería sin la certificación del CCPAE. El Consejo ofrece una certificación exigente, de máxima calidad, promoviendo el consumo de alimentos ecológicos entre la ciudadanía y explicando el método de obtención de este tipo de alimentos y su sistema de control.
Cataluña apostó en su día por un modelo público pionero de control y certificación de los alimentos ecológicos, frente a la privatización del sistema de control en muchos países europeos.
Esta apuesta conjunta de sector, administración y sociedad ha demostrado su éxito y se ha ganado la credibilidad en el mercado. Ha permitido trabajar juntos con el sector, con el acompañamiento necesario de las instituciones en forma de ayudas, formación, investigación, difusión y promoción. Y sin duda, hay que continuar en la misma línea de exigencia, para crecer, y para mantener la confianza de los consumidores en los alimentos ecológicos certificados por el CCPAE.
El consumo de productos bio en Cataluña:
Si bien Cataluña es considerado el gran clúster agroalimentario bio de España, su consumo interno también es de los más elevados de todo el país y tiene un gran potencial de expansión. La implantación y la presencia de productos ecológicos en los canales minoristas especializados es muy fuerte en Cataluña. En el año 2014 en España, entre un 25 y 30% de las ventas totales en estos canales se produjo en nuestra comunidad autónoma.
El consumidor catalán es el que más consume alimentos ecológicos de todo el país y también el que más demanda. Según el último Barómetro de percepción y consumo de los alimentos ecológicos (Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, Generalidad de Cataluña, 2015), el consumidor de productos ecológicos catalán se desdibuja cada vez más, si bien todavía el nivel de alto de estudios es un rasgo distintivo.
Esto significa que los alimentos ecológicos son comprados y consumidos cada vez más por el conjunto de la población independientemente del género, edad o el empleo, y el principal motivo de compra es la salud.
Los consumidores catalanes de productos bio
El consumidor catalán de productos ecológicos está bien informado y reconoce y valora la certificación. Según este Barómetro, nada menos que un 32,1% de los compradores habituales del hogar se declaran consumidores de productos ecológicos, y destinan un gasto medio semanal del 31,19% del total del gasto alimentario.
A fecha de hoy el principal lugar de compra sigue siendo la tienda especializada -con un 45% – pero la gran superficie gana terreno y se sitúa como segunda prioridad con el 35,2%. Además, hay que considerar un dato muy interesante, la expectativa de consumo.
Según este estudio, un 77,2% manifiesta la intención de seguir consumiendo alimentos ecológicos de forma estable y un 15,9% de los consumidores actuales manifiestan la intención de incrementar su consumo, especialmente de carnes, verduras, legumbres y frutos.
El mercado ecológico catalán:
Las estadísticas del CCPAE demuestran que Cataluña tiene una gran capacidad exportadora de productos ecológicos demandados por los países europeos y mercados como el americano o el naciente chino. Significativo el 39% del producto ecológico catalán que tiene como destino la exportación a la Unión Europea o países terceros.
Asimismo, paradójicamente, los datos confirman también el potencial del mercado interno: la demanda y el consumo interno crecen año tras año y reclaman más oferta, ya sea del país o proveniente de otras.
¿Cuál es la conclusión? Decida comercializar alimentos ecológicos elaborados en Cataluña o introducir sus productos en el mercado de consumo catalán, estará acertando en su elección.
Fuente: Artículo del presidente del Consejo Catalán de la Producción Agraria Ecológica (CCPAE), Daniel Valls, publicado en inglés en la edición especial BioFach 2017 del diario Bio Eco Actual.

